¿La procedencia social determina el valor mediático de las víctimas de homicidio?: La cobertura periodística de la violencia en México

Abstract

La política de enfrentamiento directo de las fuerzas del Estado con el crimen organizado que inició Felipe Calderón Hinojosa (FCH) en 2006 supuso que la violencia en México se elevara a niveles propios de una guerra civil. Ante el escenario de miles de muertos y desaparecidos, la sociedad mexicana pareció reaccionar con cierta apatía. Si bien algunos mecanismos, como los recogidos por la Teoría del mundo justo o la paradoja de la atención ante grandes números, podrían explicar fenómenos de falta de solidaridad similares al que se dio en México, la procedencia socioeconómica de la mayoría de las víctimas sugiere que puede haber un factor de clase que confiere valores diferenciados a las vidas de las distintas personas y que, finalmente, contribuye a la debilidad de la reacción mencionada. En este trabajo indago esta posibilidad a través de un análisis de la atención que da la prensa a víctimas de homicidio en municipios de diferente nivel socioeconómico. Elegí un análisis de prensa pues los medios de comunicación reproducen y crean las dinámicas sociales. Los resultados parecen indicar, débilmente, que existe relación entre la clase social de las víctimas y el tratamiento periodístico que reciben. Hacen falta más investigaciones sobre el papel del clasismo en el proceso de creación de solidaridad en el contexto de la guerra contra las drogas.

The policy of direct confrontation of state forces against organized crime that Felipe Calderón Hinojosa (FCH) initiated in 2006 led the violence in Mexico to reach levels of a civil war. Faced with the scenario of thousands of dead and disappeared, Mexican society seemed to react with certain apathy. Although some mechanisms, such as those addressed by the Theory of the just world or the paradox of attention to large numbers, could explain lack of solidarity similar to the one that occurred in Mexico, the socio-economic origin of most of the victims suggests that there may be a class factor that confers differentiated values on the lives of different people and, ultimately, contributes to the weakness of the aforementioned reaction. In this work I investigate this possibility through an analysis of the attention given by the press to homicide victims in municipalities of different socioeconomic levels. I chose this kind of analysis because the media reproduce and create social dynamics. The results seem to indicate, weakly, that there is a relationship between the social class of the victims and the journalistic treatment they receive. More research is needed on the role of classism in the process of creating solidarity in the context of the war on drugs.