Categorización del bienestar subjetivo a partir de las dimensiones de salud, socioeconómicas, laborales y familiares

Abstract

El termino de bienestar subjetivo se refiere a la valoración que hacen las personas de su calidad de vida y a los sentimientos tanto positivos como negativos que experimentan en su día a día (balance afectivo). Estas mediciones, al relacionarlas con otras variables, permiten detectar problemas públicos desde la visión ciudadana y lo que consideran relevante. Con el fin de obtener una visión integral de cómo se caracterizan los grupos con relación a su bienestar subjetivo y con ello determinar las áreas de política pública que tienen mayor potencial de impactar positivamente en su bienestar, la investigación tiene como primer objetivo establecer algunas de las características de los grupos con menor bienestar subjetivo a partir de un análisis de conglomerados. Las variables utilizadas fueron: género, entidad federativa, grupo de edad, nivel educativo, si padecía ansiedad o depresión, si contaba con su familia, la actividad principal que realizaba, si era desempleado y el grado de satisfacción socioeconómica, de salud y familiar. Los resultados señalan que el grupo con menor satisfacción en la vida y balance afectivo tienden a ser mujeres, con bajo nivel educativo, mayor propensión al desempleo y no contar con su familia, baja satisfacción socioeconómica y de salud, además de presentar problemas de ansiedad severa y depresión. Dada la estrecha relación entre bienestar subjetivo y salud mental, y que ambas implican un estado de bienestar a nivel personal con repercusiones en la calidad de vida, el segundo objetivo de la investigación es evaluar si las tasas de consulta en salud mental tienen un impacto en el bienestar subjetivo, para tal fin se realizó un análisis de regresión lineal tanto a nivel estatal como individual, los resultados muestran que la atención a la salud mental sí tiene un impacto en el bienestar subjetivo principalmente en el balance anímico. Esto es relevante dada la insuficiente capacidad actual del Estado para atender a la demanda de los servicios de salud mental. Se propone focalizar políticas públicas encaminadas hacia los grupos con menor nivel de bienestar subjetivo, recalcando la importancia de la atención universal y de calidad de los servicios de salud mental.

The term subjective well-being refers to the assessment that people make of their quality of life and the positive and negative feelings they regularly experience (affective balance). These measurements, when related to other variables, allow detecting public problems from the citizen's point of view and what they consider relevant. In order to obtain a comprehensive view of how groups are characterized in relation to their subjective well-being and thereby determine the areas of public policy that have the greatest potential to positively impact their well-being, the research aims to establish some of the characteristics of groups that report lower subjective well-being using cluster analysis. The variables used were: gender, state, age, educational level, whether they suffered from anxiety or depression, whether they had their family, the main activity they performed, whether they were unemployed and the degree of socioeconomic, health and family satisfaction. The results indicate that the group reports lower life satisfaction and affective balance tend to be women, with low educational level, greater propensity to unemployment and not having family, low socioeconomic and health satisfaction, in addition to presenting problems of severe anxiety and depression. Given the close relationship between subjective well-being and mental health, and that both imply a state of well-being at a personal level with repercussions on quality of life, the second objective of the research is to evaluate whether mental health consultation rates have an impact on subjective well-being, for this purpose a linear regression analysis was carried out. The results show that mental health care does have an impact on subjective well-being, mainly on affective balance. This is relevant given the current insufficient capacity of the State to meet the demand for mental health services. It is proposed to focus public policies aimed at groups with a lower level of subjective well-being, emphasizing the importance of universal health coverage for mental health.